miércoles, 20 de mayo de 2009

Sobre Maese Pérez, el organista

Para mí esta leyenda va más allá de alguien que toca un órgano en un convento; para mí es la unión de la música con la belleza y la vida. Para Maese Pérez es todo una misma cosa; para él, su órgano era su vida, con él creaba belleza, algo que va más allá de lo que se pueda ver u oír. Habría que sentir su música como lo hacía él, era escucharla y vibrar. Yo, mientras leía esta leyenda, parecía que escuchaba su música y que lo veía a él sentado frente a su órgano, tocándolo con tanta suavidad que parecía que acariciaba cada una de sus teclas como el aire acaricia una flor, con suavidad. Para mí, Maese Pérez era todo sentimiento.


Noemí Muñoz Chávez

No hay comentarios:

Publicar un comentario